Alguna vez, al empezar a comer, el primer bocado parece que "baja por el otro agujero" (por lo menos, así lo llamamos por aquí). Sin embargo, no es que empiece a toser y me ahogue, sino que me invade un dolor muy, muy (pero que muy!!!) fuerte en la espalda, a media altura, más o menos a la altura de los brazos. Simultáneamente, pierdo la vista (todo se oscurece) y hoy, incluso el oído (los sonidos se han atenuado considerablemente). Incluso se me adormecen brazos y piernas. Ni puedo hablar, ni puedo beber... no puedo hacer nada, sólo seguir sentada, con la cabeza entre las manos, hasta que aminora el dolor. Luego, me cubro de sudor y, cuando el dolor cede un poco, me levanto y me estiro en el sofá, y me duermo. Horas después, sigo teniendo dolor, aunque más suave, pero tardo varias horas en poder comer algo, porque me duele al bajar.
Es como si se me hubiese cerrado la garganta, y ese primer bocado se "atrancase" a medio camino... Lo que me preocupa es que estos episodios cada vez son más seguidos.
Total, que hoy a la cama sin cenar, como las niñas malas ...
A alguien más le pasa?
